De pastor a pastor, ética pastoral práctica

por James E. Giles

Editorial:

Editorial Mundo Hispano

, 2013

Reseña

A cualquier pastor o futuro pastor le encantará poder contar con este libro, una guía práctica en cuanto a cómo comportarse en diversas áreas del ministerio. Esta obra expone, siempre basándose en principios bíblicos, desde los requisitos morales y éticos que un pastor debe cumplir, hasta asuntos totalmente prácticos como la familia, las normas éticas relacionadas con la denominación de la iglesia, o las relaciones en la comunidad.

De pastor a pastor ofrece la gran experiencia y autoridad del Dr. James Giles, quien por muchos años ha estado enseñando a jóvenes seminaristas cuál es el pastor que Dios espera de ellos. Esta obra es el resultado de esos años de enseñanza, de la observación y del compartir las experiencias de muchos pastores, como también de un ministerio rico en la obra misionera.

Contents

Top Highlights

“El ministro de Dios tiene que ser una persona con una experiencia religiosa muy profunda, que abarca el nuevo nacimiento y un caminar constante con Dios.” (Page 20)

“El ministro que separa un tiempo cada día para meditar sobre la Palabra de Dios en su propio beneficio, podrá ministrar con mayor eficacia y autoridad espiritual.” (Page 41)

“Era un hombre que se comunicaba con Dios, para explicar sus pruebas, y Dios siempre le escuchó y le levantó de la depresión emocional para inspirarle a seguir adelante en su servicio. En esto vemos una de las cualidades más importantes para el ministro de Dios. Tiene que ser una persona inclinada a llevar sus cargas a Dios y confiar en el poder del Dios que le llamó para darle la motivación a seguir adelante en su propósito.” (Page 23)

“El ministro siempre está tomando decisiones que le afectan a él mismo, lo mismo que a su familia, la iglesia, la comunidad donde vive y el mundo que le rodea. El ser ministro del Señor en el día de hoy exige lo mejor que uno pueda ofrecer a Dios y a su prójimo.” (Page 31)

“El amor es la cualidad que garantizará cada día el éxito para el ministro.” (Page 26)