Trampas y peligros sutiles: Cómo resistir las tentaciones ocultas del ministerio
Overview
Hoy en día abundan las historias sobre imprudencias pastorales: un desfalco esta semana, adulterio la siguiente. La vida de cada cristiano está llena de tentaciones, pero los líderes espirituales parecen ser objetivo principal de los ataques de Satanás. La mayoría de pastores se enfrentan con tentaciones morales de algún tipo. Ellos conocen los detalles íntimos de las vidas sexuales de otra gente. Se encuentran en una posición de poder y autoridad. Incluso mientras trabajan para ayudar a otros, las voces de la codicia, el orgullo y la ambición les susurran: “No hace daño sólo el pensar sobre ello.” “Esta iglesia tiene éxito debido a todas las cosas que yo he hecho.” “¿Cómo puedo hacer que mi carrera profesional avance más deprisa?” Más que nunca, los pastores necesitan sabiduría moral y fuerza. Jesús lo demanda. La integridad de sus vidas y ministerios lo demanda. Ahora, tres expertos pastores explican cómo enfrentar y vencer la tentación en Trampas y peligros sutiles, el quinto volumen de Presiones Pastorales.
Top Highlights
“Observar la diferencia en cuanto al compromiso no es el problema; encolerizarnos por ello es lo que evidencia la santurronería. De hecho, la mayoría de los pastores está más comprometida con la iglesia que los miembros de la misma, y por muy buenas razones: la primera, que si no fuera así no habrían llegado a ser pastores y la segunda que a los pastores se les paga para que la iglesia sea todo en su vida.” (source)
“En esto radica la diferencia entre la ambición piadosa y la humana: la ambición piadosa se origina en el corazón del Padre y es avivada por un deseo sincero de agradarlo; la ambición humana tiene su origen en el corazón del ser humano y es manejada por las necesidades de su propio ego.” (source)
“La pereza no implica necesariamente que no estemos haciendo nada. La pereza consiste en no hacer lo que es necesario realizar cuando es necesario que se efectúe —como el piloto kamikaze que realizó diecisiete misiones.” (source)
“Es por eso que Scott Peck señala que aun los adictos al trabajo pueden ser perezosos. Se los ve trabajando furiosamente, pero solo porque están tratando de evitar hacer algo que es verdaderamente necesario.” (source)
“no estamos tan tentados a hacer cosas malas como a intentar hacer cosas que Dios no nos ha pedido que hiciéramos.” (source)